miércoles, 19 de julio de 2017

Un nene catamarqueño recuperó la visión gracias a San Lorenzo

Eber, del norte de Belén, con la ayuda de un grupo de hinchas se pudo operar en Buenos Aires y recuperó la vista.

Hace 10 años la Subcomisión del Hincha de San Lorenzo de Almagro, uno de los clubes grandes de Argentina, decidió apadrinar a la Escuela Rural Nº 298 en El Taco, departamento Ancasti. Desde entonces dos veces por año, un grupo de simpatizantes viajan hacia la Escuela, apoyados por la dirigencia del club, a llevar donaciones de todo tipo. En uno de esos viajes, los hinchas llegaron hasta la unidad escolar de La Angostura, al norte del departamento Belén. Allí conocieron a Eber Gutiérrez, un niño que había perdido la visión de uno de sus ojos tras un accidente doméstico. Ante esa situación los hinchas hicieron diversas gestiones para llevarlo a Buenos Aires y realizarle allí un tratamiento para que recupere su visión. Aunque las expectativas eran muy pocas, recientemente lo operaron y recuperó el 80% de la visión.

La historia de Eber fue publicada en el sitio web mundoazulgrana.com.ar, una página partidaria del club. Allí Lorena Alloni, una de las hinchas que trabajó fuertemente para cumplir la misión de que Eber recuperara la visión, contó cómo lograron su objetivo.

Contó que desde la Escuela de El Taco mandan un listado con necesidades, y en Buenos Aires, se recolectan donaciones que entregan dos veces por año en la localidad de Ancasti. “Al principio los viajes eran en auto, en moto, como se podía. Después por suerte se pudo ir armando mejor. Y ya hace bastante que vamos en micro, dos veces al año. Para marzo, o principios de abril, y para fin de año, los primeros días de diciembre”, cuenta.

La misma gente de El Taco les comentó la existencia de la escuela del norte de Belén y fueron a conocerla. “Es una escuela de una comunidad diaguita. Ahí conocimos el caso de Eber”, relató a la web azulgrana Alloni. Explicó que, mientras cosía una zapatilla de lona, a Eber se le zafó la aguja y se le clavó en el ojo izquierdo, perdiendo así prácticamente toda la visión de ese ojo.

Ante esta situación hablaron con los padres de Eber y el director de la Escuela para llevarlo a Buenos Aires a operarlo. “Ellos (padres y docente) al principio mucho no se animaban, hasta que el nene quiso venir también”, recordó. En la última visita de abril pasado, insistieron y arreglaron el viaje con destino al Hospital de Clínicas. Eber viajó junto a su mamá Juana y su hermanita, el resto de la familia se quedó esperando en La Angostura. “Viajaron, el Dr. Iglesias los tuvo en su casa, lo llevamos al hospital y le hicieron los estudios. Nos dijeron que era muy difícil que recuperara la vista. Había que ponerle un cristal y hacerle unas cuantas cosas”, cuenta Lorena.

Operación exitosa

Semanas atrás volvieron a la Capital Federal para realizarse la operación. Allí, por intermedio de la dirigencia de San Lorenzo se consiguió hospedaje. “El Dr Iglesias se encargó de todo lo que es la parte de hospital. Lo internaron y la operación salió muy bien. Se le puso el cristal, la lente, que hubo que comprar. Y recuperó bastante la vista del ojo, casi el 80%”, indicó.

Lorena se mostró feliz por el objetivo logrado. Además de todo lo realizado para mejorar su salud, el club le entregó carnet de socios para Eber y sus hermanos. “Esto es algo súper lindo. Más allá de todo lo que necesitan y donde viven, son de San Lorenzo y nosotros también. Gracias totales a todos los que pudieron hacer esto posible. Y a quienes lo difunden también obviamente”, expresó.

Asimismo aclaró que para realizar los viajes, que duran una semana, dejan trabajos, familia, y otras cosas para llevarles leche, mochilas, guardapolvos, elementos de electricidad, entre otras cosas básicas.

“Es hermoso. La persona que viaja, llega y se pone a llorar: te esperan con toda la escuelita hecha de San Lorenzo, canciones para nosotros. Rezamos antes de comer. Son los orígenes: la bondad, los valores. Es indescriptible”, finalizó.

Fuente: elancasti.com.ar

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