Sergio Azar, propietario del local donde funicona la biblioteca del IES, que era uno de los reclamos que venía solicitando el estudiantado, está a punto de generar otro conflicto porque hasta el momento no se pagó ni un solo mes de alquiler, habiendo transcurrido cuatro desde que se ocupó el local.
El comerciante se presentó ante la Asamblea Estudiantil, contándoles que realizó numerosos reclamos requiriendo el pago del alquiler, ya que para proceder al arriendo del inmueble tuvo que efectuar construcción de tapia, mejoras edilicias y una importante inversión, que no tiene respuesta favorable desde el gobierno con el pago, por ello les explicó a los alumnos que de continuar de esta manera, rescindirá el contrato el 1º de Noviembre.
Esta situación abriría otra instancia de reclamo por parte del alumnado, ya que este era como el único lugar donde los estudiantes pueden consultar bibligrafía, acceder a equipos informáticos algunos de ellos con internet, para poder cumplir con las materias, realizar prácticas, privándose de este local, se abre otro frente de conflicto.
Sorprende la falta de reacción para darle un corte definitivo a este inconveniente, primero mostrando un documento que detalle que la construcción del edificio no se paralizará, a pesar de que se está trabajando existen muchas dudas al respecto. La otra, hay numerosas cuestiones que subyacen como este tema del alquiler del local de la biblioteca. Si conocen el grado de conflictividad que existe, no se entiende que las cosas sigan sin que se brinde una respuesta.
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