El domingo a la noche, los Bomberos Voluntarios “Águilas de Fuego”, del departamento Andalgalá concurrieron a la comisaría local y grande fue su sorpresa cuando descubrieron que no existía ningún incendio en el lugar.
El episodio ocurrió en la Unidad Regional N°4, donde los Bomberos Voluntarios fueron convocados no para obrar ante un siniestro, como ocurre generalmente, sino para colaborar con la tarea de limpieza de los uniformados.Es que en la tarde noche se inundó el patio principal con efluentes del pozo negro, por la saturación que poseen las tuberías.
Esta situación hacía imposible la labor de los uniformados que se encontraban en este turno, y decidieron llamar a Bomberos para solucionar el inconveniente.
Cabe recordar que dentro de pocos días se cumplirá un año del cierre del penal con el que cuenta dicha institución policial, debido, entre otras cosas, a estos problemas edilicios.
La medida fue dictaminada por el juez de Control de Garantías y de Menores, Rodolfo Cecenarro, por las malas condiciones en las que se encontraba y la deficiente estructura edilicia.
El proyecto del nuevo edificio es una vieja promesa desde hace cuatro años atrás, cuando se barajaron diferentes hipótesis ante los problemas recurrentes que generaba, como el domingo pasado, la estructura deficiente del edificio.
Sin embargo, hasta el momento no se cumplió esta sentida necesidad, pese a los reiterados pedidos.
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