El presidente de la Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas, Gustavo Vittori, afirmó que la Constitución ha sido atacada desde adentro con la Ley de Medios recientemente promulgada. "Los medios de prensa constituyen hoy un límite para el poder del Gobierno y eso es lo que se buscó dinamitar", disparó.
"La Ley de Medios es una ofensiva política que busca terminar con un sistema de medios independiente que no es obediente con el poder político", dijo Luis Pardo, presidente de AIR. (Por María Arce) Clarin.com.
El titular de la Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas (ADEPA), Gustavo Vittori, sostuvo que el poder de los Kirchner "se ha vuelto peligroso" para la libertad de expresión. "La Constitución sigue rigiendo, pero ha sido atacada desde adentro" con la Ley de Medios recientemente promulgada, aseguró el directivo. Según él, la norma "va a tener muchos problemas para regir en la práctica, y mientras tanto se destruye la industria (de los medios), un capital de los pocos que tenemos" en el país.
Vittori habló por la tarde, en el panel "La Ley de medios audiovisuales en la Argentina. Riesgos para la libertad, la sustentabilidad y la independencia editorial", que moderó el colombiano Enrique Santos Calderón, presidente de la SIP hasta que la elección del martes consagre a su sucesor.
Para el directivo de ADEPA, "a medida que la curva del poder de Kirchner ha ido cayendo, se ha ido reconcentrando" en los medios. Calificó a Kirchner como "un hombre práctico", con "obsesión por el poder", que "puede salir por izquierda o derecha, depende cómo le convengan las cosas". "Los medios de prensa constituyen hoy un límite para el poder del Gobierno", y eso es lo que se buscó "dinamitar", señaló Vittori.
A su turno, y ante un auditorio con muchos periodistas extranjeros, la diputada Silvana Giudici, titular de la Comisión de Libertad de Expresión de la Cámara de Diputados, cuestionó los bloqueos de militantes sindicales a las plantas de diarios: "Ni en las épocas más graves de la dictadura militar creímos que se podía llegar a esto", expresó.
Giudici alertó sobre un "clima de intolerancia y crispación", y advirtió que con la Ley de medios "se va mutando a una nueva matriz ", la de "medios dependientes de la pauta que les da el Gobierno".
Por su parte, Luis Pardo Sáinz, presidente de la Asociación Internacional de Radiodifusión (AIR), señaló que la Ley de Medios tiene similitudes con normas de Venezuela, Ecuador y Bolivia, y fue sancionada en el mismo "contexto de hostilidad" hacia la libertad de expresión. Dijo que los gobernantes emplean un " discurso ideológico como insumo, pero para sus proyectos personales" de " perpetuarse en el poder y sin contrapesos ".
"Estos gobiernos populistas, personalistas y matrimoniales en este caso", dijo Pardo, "buscan destruir al sistema de medios privados y reemplazarlo por medios estatales y paraestatales" para lograr "la hegemonía, el control absoluto", afirmó.
"No se trata de un problema económico o de un problema legislativo, es una ofensiva política " y " la publicidad oficial es el premio o el castigo ", agregó. "Es una batalla política y se gana con la opinión pública". Hay que "persuadir, seducir y convencer a la opinión pública de que los medios privados son la mejor opción y no un sistema de medios controlados por el oficialismo como sucede en Venezuela". Por eso, "es fundamental incorporar a la ciudadanía" en la pelea por la libertad de expresión.
Luis Tarsitano, vicepresidente regional de AIR, coincidió en que la Ley de Medios "es réplica de otras dictadas en Latinoamérica" y sostuvo que la desinversión a que obliga "afecta las inversiones que se hicieron en el marco legal. Produce inseguridad jurídica, y es inconstitucional".
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