Reunidos en la convención de la IAEF, algunos se animan a hablar de que vuelve “el viento de cola”, con estimaciones de rebote de la economía hacia índices de entre un 2 y un 4 por ciento. La clave en el agro
Los economistas que tomaron parte en el panel de clausura de la trigésima Convención Anual del Instituto Argentino de Ejecutivos de Finanzas (IAEF), en la ciudad de Puerto Madryn, señalaron que tras un 2009 que finalizará con contracción, en el 2010 habrá crecimiento: Para Miguel Kiguel, director de EconViews, y Ricardo Delgado, director de Analytica, habrá un 2% positivo en el PBI de 2010, mientras que será de un 4,2% para Miguel Bein, quien basó dos puntos de esa suba en el sector agropecuario, según la información publicada hoy por el diario La Nación.
Bein puso el acento en el crecimiento de la producción agropecuaria, que pasó de 35 millones de toneladas a 97 en los últimos tres años, y de la superficie sembrada, que pasó de 20 millones de hectáreas a 33 M en los últimos años. "Este es un país donde sobran los dólares y en donde todo el crecimiento está dado por el yuyo”, advirtió, mientras pronosticó que en el 2010 la soga aportará 32.0000 millones al fisco.
Para Ricardo Delgado, asesor de Francisco de Narváez, habrá un crecimiento modesto por la fuerte caída en la inversión que repercute en el crecimiento del empleo. "El índice de demanda laboral se desplomó este año; sólo el 30% de las empresas está demandando trabajo hoy en la Argentina por eso no habrá un cambio significativo en esa variable”, sostuvo.
En tanto, Kiguel sostuvo que el viento de cola sopla para la Argentina, y que no hay datos macroeconómicos preocupantes. “Seguimos mirando las cuentas fiscales y las necesidades financieras, pero son manejables. Lo más preocupante son los temas sectoriales, el clima de negocios, las dificultades para invertir", señaló, a la vez que pronosticó tasas de crecimiento moderadas.
Bein puso el acento en el crecimiento de la producción agropecuaria, que pasó de 35 millones de toneladas a 97 en los últimos tres años, y de la superficie sembrada, que pasó de 20 millones de hectáreas a 33 M en los últimos años. "Este es un país donde sobran los dólares y en donde todo el crecimiento está dado por el yuyo”, advirtió, mientras pronosticó que en el 2010 la soga aportará 32.0000 millones al fisco.
Para Ricardo Delgado, asesor de Francisco de Narváez, habrá un crecimiento modesto por la fuerte caída en la inversión que repercute en el crecimiento del empleo. "El índice de demanda laboral se desplomó este año; sólo el 30% de las empresas está demandando trabajo hoy en la Argentina por eso no habrá un cambio significativo en esa variable”, sostuvo.
En tanto, Kiguel sostuvo que el viento de cola sopla para la Argentina, y que no hay datos macroeconómicos preocupantes. “Seguimos mirando las cuentas fiscales y las necesidades financieras, pero son manejables. Lo más preocupante son los temas sectoriales, el clima de negocios, las dificultades para invertir", señaló, a la vez que pronosticó tasas de crecimiento moderadas.
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