miércoles, 11 de febrero de 2009

Cruces entre industriales brasileños y argentinos por medidas de protección

La poderosa FIESP de San Pablo pidió "represalias" por el aumento de los precios de referencia para la importación a la Argentina de unos 800 productos. Desde la Unión Industrial bonaerense les respondieron que "deberían preocuparse por China".
Tal como está pasando en distintas partes del mundo, la crisis y las medidas que desató para proteger a las industrias locales terminó generando un nuevo enfrentamiento entre los empresarios de Brasil y la Argentina. 

Esta mañana, la poderosa Federación de Industriales de San Pablo (FIESP) le pidió Al presidente Lula Da Silva que adopte represalias comerciales contra la Argentina. El tema será tratado en Brasilia la semana próxima en reunión de ministros de los dos países.

El enojo de los industriales paulistas responde al establecimiento de nuevos precios de referencia para la importación de unos 800 productos. El Gobierno argentino adujo que esos nuevos "valores criterios" (por debajo de los cuales las importaciones son sometidas a un análisis más detallado para evitar el dumping y la subfacturación) buscan combatir la evasión fiscal y la subfacturación. Pero lo cierto es que se trata, también, de una medida que apunta a fijar unos precios mínimos por debajo de los cuales se dificultan las importaciones.

"Tenemos que responderles con la misma moneda, imponiendo restricciones a la importación de productos argentinos", declaró el titular de la FIESP, Paulo Skaf. El industrial, además, sostuvo que las que impuso la Argentina son barreras "no compatibles" con el Mercosur. Y el secretario de Comercio Exterior, Welber Barral, ya anunció que Brasil "reaccionará en forma más agresiva" contra las medidas que frenan el comercio.

La respuesta argentina no se hizo esperar. Hoy mismo, el presidente de la Unión Industrial de la Provincia de Buenos Aires (UIPBA), Osvaldo Rial, les recomendó a sus pares: "Más que por la Argentina, los industriales brasileños deberían preocuparse por China que es la verdadera amenaza para las industrias regionales".

El también vicepresidente de la Unión Industrial Argentina (UIA) destacó, asimismo, que la Argentina "acumuló en 2008 un déficit comercial de 4.300 millones de dólares con Brasil, y si se toma solo a las manufacturas de origen industrial, ese desequilibrio trepa a 7.500 millones".

Rial manifestó expresamente su acuerdo con los nuevos valores de referencia. Puntualizó que en la UIPBA recibieron en los últimos tiempos "muchas denuncias de maniobras de subfacturación provenientes de Manaos (zona franca de Brasil)" y dijo que "hay que atacar (esas maniobras) porque es competencia desleal que afecta a la producción nacional".

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