Bajo la premisa de establecer una vía alternativa de comunicación para acceder a las poblaciones aledañas a los proyectos mineros y con el objetivo de generar canales sociales, culturales, comerciales y potenciar la promoción turística de dichas comunidades, la Secretaría de Estado de Minería (SEM) trabaja en la apertura de dos huellas mineras, una en la localidad de Mutquín, departamento Pomán, y la otra en San José, Tinogasta.La iniciativa se lleva a cabo a través del Departamento Producción, dependiente de la Dirección provincial de Minería, en el marco del Plan Nacional de Huellas Mineras, que procura alternativas de acceso a zonas de interés geológico y minero. Así, el director de Minería, Marcelo Reynoso y personal del departamento de Producción recorrieron la semana pasada, sobre terreno, ambos emprendimientos.
En Mutquín, la huella será 5 kilómetros de longitud y 4,5 metros de ancho y facilitará el ingreso a las antiguas Mina de Caolín, de donde se extrae la caolinita, una arcilla blanca muy pura que se utiliza para la fabricación de porcelanas y de aprestos para almidón. Por otra parte, contribuirá a la actividad agrícola de la zona, ya que posibilitará el ingreso de vehículos a campos aledaños para el traslado de la cosecha de nuez; como así también aportará a las actividades turísticas del lugar.
En la localidad tinogasteña de San Jose, la huella tendrá una longitud de 21 Km, con un ancho de 4,5 metros. Permitirá el ingreso a zonas de interés geológico, para incentivar a exploradores mineros, por ejemplo, de la zona norte de la Sierra de Zapata, aunque su función más importante será generar un acceso directo a las poblaciones aledañas, como las del puesto El Durazno y Peña colorada, que –entre otras cosas- no cuentan con un centro de salud y en caso de emergencia, se dificulta el traslado a la ciudad de Tinogasta.
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