El Secretario General de la Asociación Obrera Minera Argentina, Héctor Laplace, tuvo un encuentro muy emotivo con el Sumo Pontífice de la Iglesia Católica, el papa Francisco. Convirtiéndose en el primer referente de la industria en poder dialogar con él. Este hecho fue considerado sumamente trascendental en la vida institucional de esta fuerza sindical.En la oportunidad el titular de AOMA le ratificó que este gremio acepta e impulsa el llamado que realizara en el mes de septiembre el Vaticano, a los efectos de encontrar una un canal de diálogo entre los actores de la industria minera y la sociedad. Laplace le significó al vicario de Cristo, que la organización que dirige entiende, que es muy valioso el llamado de la Iglesia y el mensaje que le diera a las empresas mineras a los efectos de enfocar a esta industria en función del bienestar de la sociedad y el cuidado ambiental.
En otro tramo del diálogo entre Francisco y Laplace, el dirigente minero le hizo entrega de un Rosario artesanal hecho de rodocrosita, la exclusiva Piedra Nacional, proveniente de la provincia de Catamarca.
Un sorprendido Francisco agradeció el sencillo rosario de piedra rosada que le hizo entrega quien le explicó a la vez que “está hecho con nuestra piedra nacional, se llama rodocrosita y es extraída de una mina ubicada a 3.200 metros de altura en la zona del Aconquija, en la provincia de Catamarca” explicó el dirigente. Al mismo tiempo Francisco envió una bendición para todos “los trabajadores mineros” de nuestro país.
De esta manera el símbolo religioso que fuera diseñado por la artesana andalgalense Liliana Yampa, ya se encuentra en poder de papa Francisco, quien aseguró que será de uso permanente.
El encuentro se concretó el pasado martes 26 de noviembre cuando, el Obispo de Roma, en audiencia privada, recibió a la conducción de la CGT que dirige Antonio caló y a toda la comisión directiva de CSIRA, Confederación de Sindicatos Industriales de la República Argentina.
El Libro “Diario espiritual de mis días en Roma",
El padre Andrés Pérez de la ciudad de Olavarría escribió el libro bautizado como "Diario espiritual de mis días en Roma". En él repasa sus vivencias de los últimos meses del papado de Benedicto XVI, la elección de Francisco y los inicios de éste en el cargo que ejerce desde el mes de marzo pasado.
Aprovechando el viaje de Laplace a Roma, el sacerdote le remitió a Francisco un ejemplar de su obra, la cual fue entregada en mano por el dirigente sindical, oriundo de esta zona de la provincia de Buenos Aires.
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