Según un informe publicado por el sitio Centro de Información Judicial (CIJ), en los últimos cinco años se realizaron "más de 46 mil informes de riesgo frente a hechos de violencia doméstica, y cerca de 26 mil consultas informativas". La Oficina de Violencia Doméstica (OVD), dependiente de la Corte Suprema de Justicia, registró más de diez mil hechos de violencia doméstica durante 2014.
Por su parte, la mayoría de los datos con lo que contamos con respecto a casos de violencia contra la mujer en nuestra provincia son proporcionados por organismos públicos, por la actividad periodística y por la acción de las organizaciones no gubernamentales, perteneciendo los mismos al Departamento Capital. Sin embargo, la dimensión que ha cobrado este flagelo nos resulta incierta, o por lo menos aislada, en lo que respecta a la cantidad de casos verificados en el interior. Esto sucede porque no existen fueros especializados ni áreas específicas; ningún organismo lleva los datos y seguimiento de los casos en particular. A modo de ejemplo, si en una localidad del interior, una mujer realiza la denuncia por violencia diez veces en un año, se tomara esta cifra sin atender que pertenece a la misma persona.
Por ello, la Diputada Provincial Macarena Herrera presentó un proyecto que propone la creación del “Registro Único de Casos de Violencia contra la Mujer” cuyo propósito es unificar los datos que se encuentran en las distintas dependencias de los tres Poderes del Estado Provincial.
La ventaja de la creación de este Registro es evidente por dos razones fundamentales: la primera, es que a partir de datos unificados, concretos, sistematizados y ordenados bajo los mismos parámetros podremos advertir la magnitud de la problemática, permitiéndonos conocer la realidad que se presenta en todo el territorio de nuestra Provincia; la segunda razón, atiende a la posibilidad de la gestación, creación y aplicación de políticas públicas concretas a corto, mediano y largo plazo para obtener en principio, medidas y acciones en defensa de las víctimas, y posteriormente sentar las acciones de información y prevención que a largo plazo establezcan objetivos con el propósito de disminuir la cantidad de mujeres que son víctimas de los distintos tipos de violencia.
Hoy en día, el acceso a los medios de comunicación y con ello, la visibilización de los casos de violencia es verdaderamente alarmante, es por ello que el Estado debe crear las condiciones y allanar el camino en la búsqueda de posibilidades que contribuyan a la solución de esta problemática íntimamente relacionada con los derechos humanos, de modo que no siga avanzando y de alguna manera tristemente llegue a naturalizarse.
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