En una decisión unánime, el Senado retrotrajo el aumento de 6,6% en las dietas de los senadores, que había elevado sus sueldos a nueve millones de pesos. El plenario legislativo aprobó congelar los haberes hasta el 31 de diciembre de 2024, alineándose con los aumentos de los empleados públicos: 3,5% en julio y 3% en agosto. Esta medida se tomó después de una ola de críticas por el incremento salarial, que también fue rechazado por el presidente Javier Milei, quien lo calificó de "vergonzoso" en sus redes sociales.
La resolución, impulsada por el senador Juan Carlos Romero, establece que no habrá actualizaciones en el módulo salarial desde el 1 de agosto hasta fin de año. El proyecto contó con el respaldo de todos los bloques, incluidos LLA, UCR, PRO y otros, y fue presentado en una sesión especial convocada por la presidenta del Senado, Victoria Villarruel.
El aumento previo había sido aprobado en abril, estableciendo un nuevo monto de siete millones de pesos brutos, lo que generó descontento público y demandas de mayor transparencia en los sueldos de los funcionarios. La congelación de dietas busca resolver la controversia y abrir un debate sobre la escala salarial en el sector público.
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