A partir de la vigencia de la ley 5.128 de 2004, del monto recaudado en concepto de regalías mineras que efectivamente percibe la Provincia, un 35% se destina a los departamentos donde está situado el yacimiento y un 25% al conjunto de los demás departamentos. Este último porcentaje surge del 65% que queda en manos del Poder Ejecutivo.
En el período analizado (2004- 2010) solo 4 departamentos concentraron el 72,91% del total de los recursos, monto que alcanza a la suma de $ 286.747.552. Los departamentos mineros de Andalgalá y Belén se quedaron con el 30,55% para cada uno, lo que representa $ 120.155.455 para cada uno. Santa María logró el 8,09% de las regalías ($ 31.798.050) y Antofagasta de la Sierra con el 3,72% ($ 14.638.592).
Al analizar la distribución de las regalías mineras per cápita, es decir las regalías mineras asignadas a cada departamento sobre la cantidad de habitantes, se obtiene que entre los 4 departamentos más favorecidos aparece Antofagasta de la Sierra con $ 10.237 por habitante, seguido por los departamentos Andalgalá ($ 6.621), Belén ($ 4.318) y Ancasti ($ 3.026). Los cuatro menos favorecidos fueron los departamentos Capital ($ 55), Valle Viejo ($ 311), La Paz ($ 397) y Santa Rosa ($ 728).
En el caso de Andalgalá, el departamento más beneficiado con la actividad minera, concluye que "los más de $ 90 millones que ingresaron a las arcas municipales, desde 2004, representan sin lugar a dudas el ingreso más extraordinario que haya recibido Andalgalá en el último siglo”.
Efecto precio
Por otra parte, el informe de Miranda y Florimonte analiza también la evolución internacional del oro y el cobre. Así sostiene que a partir del primer trimestre de 2005 comenzó un fuerte proceso de alza sostenido en el precio internacional del oro y cobre, solo interrumpido por la minicrisis de fines de 2008 y principios de 2009, cuando se nota la baja en los recursos mineros.
En 2004 comienza a aplicarse en nuestra provincia la ley 5.128 de distribución secundaria de regalías mineras. "Esto implica que los estados municipales comienzan a percibir la renta minera en un momento óptimo en cuanto a la cotización mundial de los metales”. En el primer trimestre de 2004, el precio de la onza de oro era U$S 408 y el precio de una libra de cobre era de 123 centavos de dólar. En el segundo trimestre de 2014, el precio de una onza de oro ascendió a U$S 1.277 y el precio de la libra de cobre a 308 centavos de dólar, lo que representa incrementos del 212,63% y 149,25%, respectivamente.
Además, señala que las explotaciones de oro y cobre en Bajo La Alumbrera alcanzan un pico de volumen de producción en los años 2002/2003, momento a partir del cual comienza un ciclo descendente que se acelera a partir de 2008. "Esta evolución muestra casi con exactitud el ciclo de actividad previsto por la empresa dividido en tres tercios de 6 años, a partir de 1998 y hasta 2016 que se ha estimado para el cese de la producción”.
Fuente: El Ancasti
No hay comentarios:
Publicar un comentario