Un gel fabricado con papaya que “disuelve” la caries; un láser que no quema y que pone fin a los problemas de encías y dolores de muelas. Cuesta creerlo, pero es real. Ambas técnicas –disponibles hoy en la Argentina– se presentaron en el 31º Congreso Internacional del Círculo Argentino de Odontología (CAO).
Su creación se enmarca en una corriente de la especialidad que aspira a ofrecer tratamientos cada vez menos dolorosos e invasivos. Y qué mejor que empezar por buscarle un reemplazante al torno, cuya existencia es causa de que muchas personas se nieguen a visitar al dentista y hasta sientan escalofríos cada vez que escuchan su sonido.
El gel que inventó la doctora brasileña Sandra Kalil Bussadori, especialista en odontopediatría de la Facultad de Odontología de la Universidad de San Pablo, contiene agentes derivados de la papaya que ablandan la dentina cariada. El compuesto se esparce sobre la lesión producida por la caries y al cabo de treinta segundos el dentista puede remover el tejido blando, enfermo, con instrumentos manuales, es decir, sin torno y sin anestesia. “La papaína tiene propiedades por las cuales detecta sólo el tejido cariado muerto. No actúa sobre el tejido sano”, aclaró Bussadori. “Y cuanto más grande y profunda la caries, mejor”, agregó.
La idea de usar la papaya fue un “momento ¡eureka!”. La madre de Bussadori, nutricionista, le comentó un día que creía que la papaína ablandaba la carne. “Si ablanda la carne, entonces tiene que ablandar el tejido cariado”, razonó la odontóloga, y empezó a estudiar las propiedades de esta enzima. Después de cinco años logró junto con su equipo la fórmula final del gel, que no tiene efectos secundarios y superó todos los tests de toxicidad.
¿El fin definitivo del torno? “No”, advirtió la especialista. “El gel tiene limitaciones: hay caries a la que sólo se puede llegar si se crea un acceso con ayuda del torno”, aclaró. Esta técnica, que sirve para adultos y chicos, cruzó las fronteras, ya fue aprobada por la Anmat y se espera que comience a ser utilizada con éxito en el país en breve.
¿El fin definitivo del torno? “No”, advirtió la especialista. “El gel tiene limitaciones: hay caries a la que sólo se puede llegar si se crea un acceso con ayuda del torno”, aclaró. Esta técnica, que sirve para adultos y chicos, cruzó las fronteras, ya fue aprobada por la Anmat y se espera que comience a ser utilizada con éxito en el país en breve.
Ayuda. “Las caries son un tejido enfermo que hay que remover y, hasta hoy, la única forma de hacerlo era mediante instrumental rotatorio combinado con instrumental filoso de mano”, señaló el odontólogo argentino Leonardo Stiberman, presidente del 31º Congreso Internacional.
Ana Blanco, miembro del CAO, afirmó que todavía no probó el gel pero que está convencida de que cosechará éxitos, sobre todo entre los chicos, uno de los grupos más afectados por las caries. “Ellos no tienen mucha paciencia, se cansan y se mueven. Estamos ávidos de técnicas que faciliten nuestra labor. Los pacientes en general van a estar más motivados a atenderse”, celebró.
La segunda “estrella” del Congreso fue la terapia fotodinámica, presentada por otra odontóloga brasileña, Giselle Santanna. El láser en odontología se usa desde 1997, pero los equipos resultaban tan grandes y costosos que la técnica nunca llegó a masificarse. La nueva terapia es más accesible y portátil.
Stiberman explicó que esta técnica se emplea para combatir los microorganismos resistentes a tratamientos con antibióticos. “Tiene un efecto bactericida y de-sinfectante total. Puede usarse para encías inflamadas, en tratamientos de conductos contaminados, en toda patología con bacterias involucradas”, describió. Es un láser que no quema sino que destruye selectivamente por reacción química las células enfermas.
Stiberman explicó que esta técnica se emplea para combatir los microorganismos resistentes a tratamientos con antibióticos. “Tiene un efecto bactericida y de-sinfectante total. Puede usarse para encías inflamadas, en tratamientos de conductos contaminados, en toda patología con bacterias involucradas”, describió. Es un láser que no quema sino que destruye selectivamente por reacción química las células enfermas.
La terapia fotodinámica también se aplica para resolver problemas de dolor, por ejemplo, después de una extracción de muela, porque tiene efecto antiinflamatorio y analgésico. Además, sirve para eliminar aftas dolorosas y herpes molestos alrededor de la boca. Como la técnica es nueva en el país, todavía no existen precios de referencia, pero se estima que será un poco más costosa que los tratamientos convencionales si se tiene en cuenta que sólo la compra de un equipo láser (la mayoría son importados de Estados Unidos y Europa) asciende hoy en el mercado a US$ 3 mil.
“Creo que tanto el gel como el láser son técnicas complementarias –analizó Stiberman–. La decisión siempre estará centrada en el criterio de cada odontólogo. No existe una terapia que resuelva todo, y hay caries para las cuales vamos a seguir necesitando el torno”. Para Blanco, estamos ante nuevas tecnologías que a futuro van a popularizarse. “Son novedades muy positivas”, concluyó el especialista.
No hay comentarios:
Publicar un comentario